Contratar un seguro agrario protege tu inversión frente a riesgos climáticos y garantiza la continuidad de tu producción.
Protección frente a riesgos climáticos y naturales
El seguro agrario cubre pérdidas causadas por eventos imprevisibles como sequías, inundaciones, tormentas, heladas, granizo y otros desastres naturales. Esto ayuda a mitigar los impactos financieros de estos eventos, asegurando que el agricultor no pierda toda su inversión en una sola temporada.
Estabilidad Económica
Al contar con una indemnización en caso de siniestros, el agricultor puede mantener la estabilidad financiera de su explotación. Esto es especialmente importante en un sector tan volátil como el agrícola, donde los ingresos pueden variar considerablemente debido a factores externos.
Acceso a financiación
Tener un seguro agrario puede facilitar el acceso a créditos y financiamiento. Las entidades financieras suelen ver con mejores ojos a los agricultores asegurados, ya que su riesgo de impago es menor al estar cubiertos frente a pérdidas importantes.
Fomento de la inversión y la modernización
Al tener la tranquilidad de estar protegido ante posibles pérdidas, los agricultores pueden invertir más en la modernización de su explotación, comprar maquinaria, mejorar sus técnicas de cultivo y, en general, aumentar la productividad, lo que beneficia tanto al productor como al sector en su conjunto.
Protege hoy tu cosecha para asegurar el éxito de tu mañana.
Protección
Prevención
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